75-LA ESPERANZA DE LA HUMANIDAD




LA ESPERANZA DE LA HUMANIDAD

Abrazada a la Esperanza de conseguir algún vestigio,
que evidencie al Creador
marcha la Humanidad a la deriva, aturdida y a ciegas.
Con inútil empeño se esfuerza desesperada y desmedidamente,
cuando percibe, cada vez mas, desvanecida su ilusión.

El eterno silencio y la razón creciente de la Humanidad
agrandan enormemente la brecha que separa,
a ese inservible y absurdo empeño de continuar con eterno engaño,
contra la realidad científica y perfectamente lógica y convincente…

Grandes daños y cuantiosas pérdidas sufrió y sufre la Humanidad,
aunado a un inmenso atraso y estancamiento sin paragón,
como consecuencia de esa manía enfermiza de adorar a alguien,
por no haber entendido ni aceptado la realidad.

Inmensos siglos de confusión,  desconcierto y grandes atrocidades,
fueron sus resultados, al tratar de adjudicarle la autoría
del por qué estamos aquí, a un creador inexistente…
que solo fue y es una construcción humana… ¡un icono!

Con el correr del tiempo, esas cualidades adjudicadas al Creador
fueron superadas enormemente…dejandolo inestable e insostenible,
carente de veracidad y sentido, ¡disfuncional! ¡Inoperante!.
¡Todo se está desplomando…! ¡Hoy se hacen esfuerzos titánicos por rediseñarlo!

Delante de nuestra sabiduría… y todos los días veíamos y vemos…
… nos percatamos que estábamos y estamos equivocados…
¡Deliramos adormecidos, abrazados a la fe religiosa…!
a esa fe religiosa impuesta, de conseguir alguna señal que avale nuestro delirio.

La realidad ha comenzado a imponerse, lenta y progresivamente,
surge un nuevo Dios naciente, ¡Humano!, ¡Real! Y ¡verdadero!
¡Es el Hombre!
Que ha comenzado a crecer… y así se difunde por todas partes.
Estamos concientizando que ese Dios, que con desesperación y eternamente buscado
lo teníamos a nuestro lado ¡era y es el mismo Hombre!
¡Un Dios Terrenal!

Con él, nunca sufrimos del eterno Silencio.
Con él, si se podía Dialogar…
Con él, nunca padeceremos de la Espantosa Soledad…
Con él, entenderíamos el ¡porque y para que estamos aquí!
Con él no habría la Enfermiza Adoración… solo la Compañía

Con su inteligencia, imaginación y creatividad todo lo alcanzaremos,
modificaremos el espacio y el tiempo a nuestra necesidad,
transformaremos la materia y la energía cuando lo requiramos
… y como niños, jugaremos con las canicas del Universo
El Cosmo lo acomodaremos a nuestro antojo…

El progreso se acelerara, cada vez más, con asombrosa velocidad,
convenciéndonos y convenciendo a los que vienen atrás,
que ese omnipotente Creador, lo tenemos a nuestro lado
¡Imponente y deslumbrante!
¡Y se llama Hombre!

¡Es ese, el Nuevo Dios!
que no ha terminado de nacer
¡No lo adoremos...porque lo enfermáremos!
¡Admirémoslo!
¡Unámonos todos en uno solo!
¡Para hacerlo cada vez mas grande, sabio y sublime!




LA ESPERANZA DE LA HUMANIDAD
11/02/2017
Jesús Riquelme Senra


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