245 - CONCILICIACION ENTRE DIOS Y EL DIABLO SEPTIMA PARTE
CONCILICIACION
ENTRE DIOS Y EL DIABLO
SÉPTIMA PARTE
CUENTO – REFLEXIÓN -ENSAYO #97
Casi de
inmediato,
Dios convocó al Diablo,
para la
reunión pactada y privada,
quien
acudió con una:
extremada
rapidez vertiginosa.
Se
escuchó los saludos de Dios,
con
enfáticas palabras esperanzadoras…
tenía
otra expresión en su faz…
¡reflexionadora!
El Diablo,
le respondió el saludo,
Igualmente,
muy emocionado por intuir,
que se
avecinaba,
una
gran solución,
hija
del sabio dialogar,
del saber
razonar,
por
encima de la fe.
Dios, inicia sus breves palabras:
vibrantes,
sonoras y emocionantes,
“he
pensado mucho…demasiado…”
“también
he aprendido exageradamente…”
¡solo
sabiendo escuchar a los demás…!
y
procesar sus argumentos,
que
hasta ahora los había desechado,
¡subestimándolos!
Saber
aprender…
es
saber escuchar…
con
mucha atención… y comprensión…
meditando
cada palabra, que pronuncia quien habla.
Te
resumiré todo mi aprendizaje,
en
estos angustiosos momentos,
¡todos
estábamos confundidos!
aturdidos
por las malas:
¡enseñanzas
– aprendizajes ¡
y por
las aseveraciones equivocadas,
por la
ausencia de la calidad del saber…
además,
yo no supe dialogar…
me engreí
enfermizamente…
También
porque la soledad nos acorraló,
y nos
hizo concluir erradamente,
nos aturdió profundamente,
deformándonos
la realidad.
Vivimos
en un mundo pequeñísimo…
sesgado
y pintado con el color de nuestra,
solitaria
imaginación,
no
compartida con los demás,
ha sido
un aislamiento enfermizo.
¡tú y
yo, solo somos!
¡símbolos
abstractos imaginarios!
¡creados
por la humanidad!
por su
gran soledad que los embriagaba,
y les
deformaba la percepción de la realidad,
les
impedía vivir en el:
aquí y
ahora verdadero,
sin
estar atado a las ficciones.
Ellos
nos impregnaron,
de todo
su contenido mental,
mal
concebido y mal interpretado…
“tal
como ellos creyeron que era la vida”
armada
y decorada, con sus cuentos y novelas…
con sus
deformadas percepciones de la realidad,
no
entendiendo al gran y maravilloso:
¡universo!
exactamente
como es,
y lo
deslumbrante que es la vida.
Los
humanos solamente son pura materia,
y
nosotros solamente somos:
unos
símbolos imágenes y creaciones por ellos,
transitoria
y aliviadoramente,
solo
mientras ellos,
estén
insertos y formados,
por esa
materia organizada,
¡llamada
vida!
¡totalmente
probabilística!
¡aleatoria!
¡no
hubo creador!
¡ni
intencionalidad!
¡todo
fue un proceso azaroso!
Un
procesó fortuito y casuístico,
cuando
la energía se convertía transitoriamente en:
¡materia
palpitante!
y
cuando esta, evolucionaba y se transformaba,
probabilísticamente,
¡en
materia humana!
¡transitoria
y perecedera!
A todos
los humanos les nace en su interior:
¡un
algo abstracto indescifrable!
¡inimaginable
y desconocido!
que lo
llaman indistintamente,
¡el yo!
¡la
personalidad!
¡el
alma!
Ese algo,
tiene conciencia, de su sentir…
De esta
manera,
crearon la ficción, que ya conocemos.
y con
ella nos contaminamos todos,
por
ausencia de la:
¡enseñanza
– aprendizaje!
¡apropiada!
¡ajustada
a la verdad!
Todo se
originó porque:
ellos no consiguieron una explicación del:
¡significado
de la vida!
¡creíble!
ni tampoco
entendieron el porqué
¡los
humanos están armados “como vida”!
para
que… y porque…
Inventaron
y decoraron una cantidad de historias…
fabulas,
leyendas, novelas, religiones…
que
además de dispersar su confundido saber,
lo
enredaron aún más,
creándoles
ficciones e imágenes inexistentes o falsas,
¡fuera
de la verdad!
¡inciertas!
Ni tú,
ni yo, ni todos los ángeles,
¡somos
verdaderos!
¡solo
somos una ficción aleatoria…!
que se
unen a todas las ficciones que han ido creando posteriormente:
¡todos
los humanos!
para
poder darle un:
¡significado
a sus vidas!
alguna
interpretación posible, que aclaren
¡a su
presencia en la tierra!
¡a su
conciencia, que la llaman alma!
y que
además la calificaron erróneamente como:
¡inmortal!
¡allí
comenzó la tragedia humana!
¡somos
unas figuras abstractas!
unos
símbolos, unos iconos, unos emblemas…
¡nada
más!
Yo me obsesioné con la imagen,
que me
crearon y le dieron vida…
con la
gran propaganda que le hicieron,
artificial
y publicitariamente,
creando
una ficción disfrazada de verdad.
De esta
manera sacrificaron sus vidas,
con
inútiles e inoficiosos rezos,
promesas
y ofertas aburridísimas,
estancando
el saber,
¡que
debieron adquirir!
Muchas
de las guerras, torturas y castigos…
fueron
inducidas y provocadas,
por
nuestras:
imágenes
abstractas
¡usando
nuestros emblemas!
somos
culpables e inocente, al mismo tiempo,
de
todas esas atrocidades.
Debemos
entender y estar claros,
que tú
y yo,
solo
somos símbolos,
sin
vida
nos
costará mucho, a nosotros,
y mucho
más,
a los humanos,
superar esta ficción.
Lo más
difícil y costoso para los humanos,
es convencer,
a aquello que estén obcecados,
hipnotizados
y aturdidos, absortos con las religiones,
porque
caen en un bloqueo irreductible,
¡no
razonan!
Yo represento ahora, al bien y a la perfección,
para la
humanidad,
y tu
representas, al mal y a la imperfección,
¡esta
es la idea que tienen los humanos de nosotros!
Se que
has sufrido mucho,
¡increíblemente!
ambulando
de un sitio a otro,
sin
descanso ni paz,
sin
ningún asidero que:
te
brindara un bienestar.
Los
ángeles, también se encuentran divididos,
en
varios bandos…dispersos…
unos,
disfrutando del paraíso celestial…
otros,
pagando condena en el purgatorio, parcialmente…
y
algunos en el infierno… pagando condena total…
y los
que están en el limbo,
pagando
injustamente una condena parcial…
de la
cual no son culpables…
Yo no sabía nada de todo esto…
esto
fue idea y obra de los humanos…
y por
consiguiente me la adjudicaron a mí,
¡a
Dios!
Tenemos
una necesaria y urgente tarea de:
¡diseñar
una etapa transitoria!
durante
la cual podamos todos:
¡conservar
nuestros símbolos provisionalmente!
haciendo
los correctivos necesarios,
lentamente,
como
una eventualidad,
¡interina
y pasajera!
¡con
mucha humildad y sabiduría!
para
poder igualar a los dos símbolos:
¡Dios y
el Diablo!
sin
distinción alguna,
suprimiendo
todos los santos,
¡ellos
son inexistentes!
para
evitar que continúen,
¡los
autos engaños!
y
continúen utilizándonos…
como iconos,
en sus ficciones,
¡a los
nuevos nacientes!
Se eliminará radicalmente y sin
demora,
¡la
ofensiva adoración!
enfermiza
tanto para ellos,
¡los
adoradores!
como
también para nosotros,
¡los adorados!
sobre
esto he pensado mucho:
¡el Diablo
tiene razón!
¡si se
exige la ADORACIÓN!
¡nunca
podrá haber COMPAÑÍA!
por eso
me encuentro terriblemente:
¡solo!
¡desasosegado!
es como
si los humanos,
me
hubieran castigado…
Esta
enfermiza manía,
ofensiva
y humillante,
¡la
crearon los humanos!
mientras
crecía su saber.
Ahora
bien, se avecina que:
el pensar
y el razonar humano,
crecerá
notablemente,
y lo
emplearán para diseñar:
¡su
nuevo caminar!
se
acelerará increíblemente:
¡la
sabiduría humana!
porque
no tendrían que perder su tiempo los humanos
¡aturdiéndose!
rezando
y subordinándose a las:
manías y extravagancias,
caprichosas
y obsesivas,
¡paranoicas!
Produciendo
y cultivando, muñecos de yeso,
adorándolos
absurdamente,
marchando
en la procesión humana,
¡insensatamente!
desorientado
y sin contenido de verdad,
rezando
continuamente con:
estribillos
repetitivos,
enloquecedores,
denigrantes.
Tampoco
yo sería el receptor,
de las
infinitas peticiones de los humanos,
sobre
todo, lo que ellos:
¡no
podían obtener, por su propio esfuerzo!
El Diablo
se encontraba perplejo:
escuchando
a Dios,
cautivado
y sobrecogido por el énfasis en su hablar,
fascinado
a la vez porque se acercaba:
¡la tan
ansiada conciliación!
seducido
y radiante de alegría,
porque
se aproximaba la impresionante conciliación,
¡el impacto le impedía articular palabras!
Interrumpe
el Diablo,
henchido
de alegría,
abarrotado
de esperanzas…
pleno y
lleno de emociones…
¡no las
podía controlar…!
colmado
y atiborrado de:
una
rebosante felicidad,
y dice:
te
propongo:
que
convoques a una conferencia o convención,
entre
todos los habitantes del:
¡paraíso
celestial!
y le resumamos, estas consideraciones y análisis,
!de nuestra reunión privada!
deberás hacerla despacio y con mucha sutileza,
usando
una pedagogía diplomática y estratégica.
Se van
a entusiasmar sobremanera…
¡el
éxtasis los va invadir!
El Diablo
casi irreconocible,
derrochando
y esparciendo alegría y entusiasmo,
dice
cantando:
¡ya yo
no seré más!
¡el
símbolo del mal!
¡me convertiré
en el símbolo del bien!
¡el mal
no existe!
¡es una
maquinación humana!
que fue
amañada, arreglada y manejada,
¡como
una maniobra!
para
ocultar su desesperación,
porque
nunca le encontraron,
¡un
significado creíble a la vida!
todo
fue una,
¡catastrófica
decisión!
Todos
los ángeles se reunirán como hermanos…
y se
unirán a las demás almas,
que
todavía están pagando condena,
en todas las cámaras de torturas…
en el
infierno, purgatorio y limbo…
todo
será pura armonía, regocijo y felicidad.
La humanidad
al fin se enrumbará,
por el camino del saber,
en
busca del derrotero:
de la perfección
humana…
y
también de la inmortalidad…
altamente
ansiada,
y
rápidamente, la humanidad,
se
convertirá,
¡en su
propio Dios!
en el
símbolo de la perfección,
y de aquí en adelante:
la
utopía humana será alcanzable…
y será
convertible en una realidad venidera.
Dios se compromete,
haciéndole
caso al Diablo,
a
convocar la solicitada:
convención
o conferencia prometida…
por
primera vez en toda la vida del cosmos.
¡Dios y
el Diablo!
se
abrazaron al despedirse:
¡formando
una sola cosa!
fundiéndose
los dos, en uno solo.
Después
del impresionante abrazo conciliatorio,
lenta y
gradualmente,
respirando
profundamente,
Dios dice:
y con
este abrazo fraternal,
plasmamos
y evidenciamos,
el
devenir de la humanidad,
y le
estamos dando:
un
enorme ejemplo a seguir, a los humanos,
de que
a pesar de que nosotros fuimos:
¡enemigos
irreconciliables!
durante
toda la pasada eternidad,
hoy con
la magia del saber dialogar
sencillo,
honesto y sincero,
cimentados
con la enseñanza y aprendizaje,
se
neutraliza y se entierra definitivamente:
todas
las desavenencias y errores,
que
hemos cometido…
dándole
cabida al nacimiento,
de una
hermosa y duradera amistad,
¡sólida
y profunda!
Este es
mejor legado dejado,
como un
ejemplo universal que guiará,
a la
maravillosa y genial humanidad.
Dios, tomando una profunda aspiración,
como si
le saliera del alma,
dice,
“le
regalo a todos un pensamiento mío”
que
resume toda mi existencia…
todos, absolutamente
todos:
fuimos…
sin
saber porque…
lo que
no sabíamos que.
Continua
en: CONCILIACIÓN ENTRE DIOS Y EL DIABLO Cuento-reflexión-y ensayo N°98 Octava
parte |
CONCILICIACION ENTRE
DIOS Y EL DIABLO SEPTIMA PARTE CUENTO – REFLEXION -ENSAYO
#97 10-09-2023 Jesus Riquelme Senra jesusriquelmesenra@gmail.com |
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