234 - CONCILIACIÓN ENTRE DIOS Y EL DIABLO Quinta parte

 

CONCILIACIÓN ENTRE DIOS Y EL DIABLO

Cuento-reflexión-y ensayo N°94

Quinta parte

 

Dios, tras un esfuerzo titánico,

desmedido, colosal y desproporcionado…

casi inconcebible para cualquier ser,

agotando todos los recursos disponibles…

recorriendo grandes inmensidades…

revisando innumerables sitios inimaginables,

¡en busca de su historia!

¡de su origen!

¡de sus progenitores!

¡de algo que lo identifique con su infancia!

 

Agotado y extremadamente abatido,

por el gigantesco y fabuloso rastreo,

¡enorme e ilimitado!

¡exorbitante!

 registrando todos los lugares,

yendo al encuentro de su infancia,

y explorando todos los rincones.

 

Enfrentaba una lucha interminable…

¡consigo mimo!

afectada y limitada por el desconcierto…

por la incertidumbre y la confusión.

 

 la ambigüedad unida a la indecisión,

le restaba recursos mentales…

para poder localizar, encontrar e identificar,

¡a sus progenitores!

¡a quienes, lo educaron y formaron!

¡a quienes fueron los responsables de su personalidad!

¡de su pensar y de su actuar!

¡de su saber!

¡de su yo!

 

Todo a consecuencia de la,

iniciada:

conciliación entre,

Dios y el Diablo,

¡ya Dios no sabía,

quien era él, en verdad!

 

Absorbido por la incesante búsqueda,

sin detenerse un solo instante,

escudriñando todos los sitios,

cómo una obsesión incontrolable,

con una total perseverancia,

¡casi a punto de claudicar!

por no haber podido,

conseguir ningún resultado…

o alguna pista o señal…

que conduzca o indique,

alguna orientación al menos,

de encontrar a alguien que sepa,

que lo acerqué o aproxime,

al que haya o hubiese sido su:

¡progenitor!

alguien autor de su:

¡enseñanza aprendizaje!

o por lo menos un,

causante de su:

¡auto concepto!

  que se formó de sí mismo.

 

Se auto preguntaba continuamente,

sin cesar un solo momento,

¿de dónde yo aprendí toda mi manera de actuar?

¿quiénes me enseñaron a ser prepotente?

¿de donde yo aprendí a vivir en soledad?

¿de dónde yo aprendí…?

¡que tenían que adorarme,

por encima de todas las cosas!

¿de donde yo aprendí… tantas cosas negativas…?

 

Dios, cayó en un decaimiento y depresión…

inenarrable

se desvanecía, a punto de sucumbir,

a veces parecía que se desmoronaría rendido,

cercano a desmayarse,

empezó a ir cesando y disminuyendo,

de su agotadora tarea inconcebible e ilocalizable.

 

Tomó pausas, aflojando y disminuyendo,

interrumpiendo y eliminando,

muchísimas de sus actividades,

que lo agotaban desmedidamente.

 

La calma lo hizo repensar mejor las cosas…

y por primera vez,

durante toda su existencia,

decidió hablar con los ángeles,

    más allegados al paraíso celestial,

donde residían.

 

No pudo conseguir con ellos,

respuestas satisfactorias…

¡a su gran búsqueda y necesidad!

ya Dios, estaba sospechando que:

¡detrás de todo esto!

había una gran ficción,

¡que se la estaban ocultando o escondiendo!

 

Después de un prolongado tiempo…

del infructuoso asesoramiento…

posterior, inesperada y repentinamente,

se acercaron dos ángeles,

muy humildes y equilibrados,

con la mirada clara y penetrante.

 

Uno de ellos fue un mártir:

¡de la inquisición!

duramente castigado y severamente torturado…

y finalmente muerto en la hoguera

¡para lavar su alma ¡

de la maldad del Diablo

 

Había sido señalado y acusado,

¡indebidamente de Ateo!...

y estaba recién llegado del purgatorio…

después de haber pagado la condena,

recatado y librado por Dios

¡como un acto de misericordia!

 

Y el otro ángel:

también recién llegado del limbo,

por haber pagado una larga condena,

por no haber sido bautizado,

¡antes de tener uso de razón!

pero había logrado obtener la:

¡redención de Dios!

la manumisión y la absolución, posteriormente,

por haberse arrepentido

“del olvido de sus progenitores”

de haberlo bautizado a tiempo

 

Descanse un instante, Señor

le dice los angeles,

¡serénese!

confié en nosotros

y verá que le resolvemos todo:

¡de inmediato!

usando la razón.

todo lo que usted busca,

con tanta ansiedad, desasosiego y desesperación

se lo encontraremos

¡espere unos minutos cósmicos nada más!

 

Ante de transcurrir el minuto cósmico,

los ángeles recién llegados:

¡del purgatorio y del limbo!

le dicen a Dios:

usted debe buscar ángeles neutrales,

que lo aconseje bien,

que no estén sesgados con sus errores…

¡porque nunca lo aconsejarán bien¡

 

Continúan diciendo los ángeles:

usted está buscando un progenitor:

¡que es inexistente ¡

¡usted no tiene progenitores!

usted es el resultado de la:

imaginación y creatividad de los:

¡Humanos!

ellos los diseñaron a usted,

con todos las virtudes y defectos humanos

a imagen y semejanza de ellos,

¡usted es un híbrido humano ¡

nunca tuvo infancia ni adolescencia

¡tampoco tiene progenitores!

sus progenitores fueron:

una colección y combinación de mentes,

¡humanas!

muchas contradictorias o incoherentes,

otra inconexas, disímiles y enfrentadas,

muchas opuestas, absurdas y dispersas,

siendo todas desorientadas y rebatibles.

 

Usted es una obra concebida y diseñada:

¡por los humanos!

abstracta, virtual y conceptual,

¡un símbolo del bien…y un símbolo de la perfección…!

 

Por eso usted actúa como los:

 ¡humanos!

con sentimientos, emociones y comportamientos:

 ¡terrícolas!

imitándolos a ellos,

sin saberlos ni advertirlo…

Toda su conducta y comportamiento es:

¡Humano!

está repleto de rasgos, huellas y cicatrices,

humanas,

lleno de marcas, señas y sentir:

 ¡humano!

 totalmente tatuado por ellos.

Todo el contenido de su:

pensar, sentir y obrar…

¡es de ellos!

como las venganzas, odios, rivalidades, castigos…

así como también los resentimientos,

y todas las formas de razonar y pensar…

 

¡Usted no es un Dios verdadero!

¡solo es una ficción humana!

que se encuentra sugestionada,

de tal manera,

que está encarnándolos,

con tanto apasionamiento y vehemencia,

que todos creen,

en esa absurda ficción…

¡la fantasía de la vida!

 ¡la relatividad de la vida!

que será veraz,

para un observador que esté contenido,

dentro de toda la novela vital,

transitoria y perecedera,

nacida allá, cuando,

la humanidad,

despertaba dentro de su prolongado:

sueño prehistórico,

acorralada por no tener:

 la menor noción del:

significado de la vida,

“sin un porqué, ni un para qué”,

ni tampoco un sentido religioso,

¡convincente!

¡todas eran vivencias desorientadas y azarosas!

 

En ese entonces:

los humanos empezaban a bajarse de los arboles…

ocupando las cuevas y las cavernas,

para resguardarse del temible escenario prehistórico.

 

Todo fue una transformación permanente,

por un escenario plenamente probabilístico:

del universo…

del cosmos…

de la tierra…

y de la vida…

¡un completo escenario aleatorio!

¡regido por lo casuístico y fortuito!

¡todo un proceso continuo estocásticamente!

 

Dios interrumpe muy conmovido y aletargado a la vez,

solicitando a los ángeles,

un urgente descanso, de algunos minutos cósmicos,

para reasimilár y revisar,

¡el concepto de lo que es:

él en verdad!

 

Todos consintieron en ese descanso…

y Dios prometió, como de costumbre,

que cuando ya se sienta bien él,

los convocará nuevamente…

hablando casi, sin sonido en su voz,

que aparecía quebrantada y él desconcertada,

un tanto azorada,

como si la reunión lo hubiera desbaratado,

confundiéndole y dispersándole su personalidad,

¡se sentía, que no era dueño de sí mismo!

 

En su mente se avecinaba un sentir extrañadísimo…

se le estaba desboronando su yo precipitadamente,

se encontraba en un estado aletargado,

como si la modorra lo estuviera paralizando…

¡al punto del desmayo!

por el principio del propio valer.

 

Continua en:

CONCILIACIÓN ENTRE DIOS Y EL DIABLO

Cuento-reflexión-y ensayo N°95

Sexta parte

CONCILIACIÓN ENTRE DIOS Y EL DIABLO

Cuento-reflexión-y ensayo N°94

Quinta parte

02-09-2023

Jesus Riquelme Senra

jesusriquelmesenra@gmail.com

Comentarios

Entradas populares de este blog