104-LA TRAICIÓN DE UN AMIGO
Un amigo se acerca a saludarte…
finge alegría por tus triunfos…
todo un teatro se desenvuelve en el
diálogo.
pregunta con insistencia la veracidad
de los logros,
su mirada agobiada evidencia el
malestar de la confirmación.
Una sonrisa, tornada en mueca, lo
acompaña.
su semblante, un tanto pálido, no
puede disimularla.
La envidia aflora con rapidez y marca
todas sus facciones
su rostro angustiado confiesa su
trance.
Los gestos y las manipulaciones
desentonan con sus palabras y voz.
Es un ser que se ha abandonado.
Ha permitido que las pasiones bajas se
instalen en él.
No le han enseñado a quererse o no lo
ha aprendido.
Considera al resto de los hombres como
contrincantes.
Lo abruma el éxito de los demás.
Abatido se desalienta al percibir el
progreso del prójimo.
Arrinconado, cada vez más, se agrava.
No acepta que lo ayuden, siempre
evade.
Convencido está que posee la verdad
consigo.
No admite diálogo, ni deja hablar a
sus congéneres.
Deformado se encuentra su mundo
interno y externo.
Comienza una lucha interminable,
entre el afecto profesado y la
traición que se avecina
como miembro de la humanidad intentas
salvarlo
la razón te ubica en la dolorosa
realidad,
nada puede hacerse ¡está cristalizado
inmodificablemente!
Un amigo más se ha alejado y conspira.
La incertidumbre envuelve la relación.
La amistad enferma, por la deslealtad,
se enfría.
La soledad se agudiza, agrandándose la
distancia.
Un gran silencio precede al murmullo
que interrumpe
contamos con unos menos…
El se ha estancado, o nosotros nos
hemos superado…
Su trillar repetitivo nos conduce a la
ambigüedad.
La perplejidad de la confusión impone
la vacilación.
¡Retirados reflexionamos, y
confundidos aspiramos profundamente!
¡Nada puede intentarse!
¡es la traición que ha vuelto a
golpear!
La traición de un amigo
Jesús Riquelme Senra
5/4/11